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viernes, 7 de noviembre de 2014

Eres un árbol, de Antonio Goicochea

Cuento de Antonio Goicochea Cruzado
Imagen: EDUCARTE

Con ánimo inusitado decía: -¡Cómo hay nombres que no se corresponden con la realidad!, tal doña Blanca Prudencia, es negra y atrevida; el señor Agraciado Pino, ni es dotado de hermosura ni es alto como una conífera y, además, andariego como nadie; doña Selene, ni un ápice de blancura lunar; don Ángel Villacorta, es un demonio en este longo pueblo; doña Nieves Flor, no tiene la blancura de la nieve ni la gracia de una rosa; y usted don Epigmenio Aquino, cuyo nombre significa apresurado, ansioso y su apellido, comerciante o marinero, es todo lo contrario, posado, calmo que aquí se enraizó como un árbol y no pretende salir de Condorumi. 



Usted es un árbol.

-Sí, Aquí nací y aquí moriré, contestó a don Calvino Presbítero, el ateo convicto y confeso de Condorumi.


sábado, 1 de noviembre de 2014

Los Pasteles de Doña Jesús, de Antonio Goicochea

Autor Antonio Goicochea Cruzad
Imagen: Educarte
Hace cincuenta años en San Miguel.
Doña Jesús Villanueva había venido a San Miguel dejando su querido Hualgayoc, trajo con ella la elaboración de “pasteles” que enriqueció la ya rica tradición amasijera sanmiguelina.
No todos los días había pasteles. Doña Jesús los ponía en venta para  la Pascua de Resurrección, Corpus Christy, Fiesta Patronal de San Miguel Arcángel, Navidad, Feria de Virgen del Arco y año nuevo. Llevaba como “recau” carne de chancho o natilla.
Quien no llegaba a tiempo al horno, ubicado en el Jr. 28 de Julio, tenía que esperar que abrieran su tienda de venta en la esquina Bolognesi y 28 de Julio. 
Casi siempre a las siete de la mañana ya había vendido esta ricura. Para la Fiesta Patronal y para La Virgen del Arco -29 de diciembre- tenía que amasar extra, ya que los visitantes de Cajamarca, Lima, y otras ciudades, pagaban de antemano “sus pasteles” para llevarlos a su ciudad de residencia.
Para prepararlos seguía una rutina no cambiada hasta que dejó este paraíso en busca de otro mejor: en la víspera preparaba la masa inicial utilizando como fermento “concho” de chicha. 
Tenía que ser medido con precisión el tiempo de espera porque si se “pasaba” el tiempo la masa se envinagraba, y -Nadie come pan vinagre –decía. En la madrugada agregaba más harina, yemas de huevo, manteca de chancho, agua tibia y sal y encargaba doña Jesús Delgado, Doña Amelia

martes, 28 de octubre de 2014

No dejes morir el amor

Con afecto de Ruth Vásquez
Imágenes Educarte

Hubo una vez en la historia del mundo un día terrible en el que el odio que es el rey de los malos sentimientos, los defectos y las malas virtudes convoco a una reunión urgente con todos ellos.

Todos los sentimientos negros del mundo y los deseos más perversos del corazón humano llegaron a esta reunión con curiosidad de saber cual era el propósito.

Cuando estuvieron todos hablo el Odio y dijo: los he reunido aquí a todos porque deseo con todas mis fuerzas matar a alguien".

Los asistentes no se extrañaron mucho pues era el Odio que estaba hablando y el siempre quiere matar a alguien, sin embargo todos se preguntaban entre si quien seria tan difícil de matar para que el Odio los necesitara a todos.


Quiero que maten al Amor", dijo. Muchos sonrieron malévolamente pues más que uno le tenía ganas. El primer voluntario fue el Mal Carácter, quien dijo:

Yo iré, y les aseguro que en un año el Amor habrá muerto, provocare tal discordia y rabia que no lo soportara". Al cabo de un año se reunieron otra vez y al escuchar el reporte del Mal Carácter quedaron tan decepcionados.

Lo siento, lo intente todo pero cada vez que yo sembraba una discordia, el Amor la superaba y salía adelante.

Fue entonces cuando muy diligente se ofreció la Ambición que haciendo alarde de su poder

viernes, 24 de octubre de 2014

El acomedido cobrador de microbús por Antonio Goicochea

Cuento publicado en el libro "El Sonido de las Caracoals".
Autor: Antonio Goicochea Cruzado
Imagen: EDUCARTE

Al subir al microbús me extrañó que el cobrador me tomara del brazo y con el mayor cuidado me ubicara en el asiento reservado para mayores de edad y personas con dificultades físicas. Ya sentado cómodamente, limpié mis lentes oscuros que el oftalmólogo me había recetado para cuidar mis ojos a los dos días de haber sido operado de “orzuelo” o chalazión, como ellos lo llaman, luego coloque a mi lado el pequeño tubo delgado de aluminio que había comprado, de la vidriería “El Dorado”, para un arreglo en casa.


-Bajan en el siguiente paradero-, dijo con atiplada voz el cobrador, para hacerse oír por sobre el sonido del altoparlante que llenaba el ambiente con una salsa de moda, y bajaron varios pasajeros.

 –Bajan, bajan, siguen bajando, ya, dale, dale Campeón.

En microbús seguía su ruta y entre subidas y bajadas; y subidas, el vehículo se llenó de tope a tope y el cobrador: -Al fondo hay sitio…, en la última fila van cinco, acomódense señores,

martes, 21 de octubre de 2014

Viajando en Burro

Con afecto de Ruth Vásquez
Imágenes Educarte

Había una vez un matrimonio con un hijo de doce años y un burro.

Decidieron viajar, trabajar y conocer el mundo. Así, se fueron los tres con su burro.
Al pasar por el primer pueblo, la gente comentaba: "¡ Mira ese chico mal educado!

Él arriba del burro y los pobres padres, ya grandes, llevándolo de las riendas!".Entonces, la mujer le dijo a su esposo:

"No permitamos que la gente hable mal del niño." El esposo lo bajó y se subió él.

Al llegar al segundo pueblo, la gente murmuraba: "¡ Mira qué sinvergüenza ese tipo! Deja que la criatura y la pobre mujer tiren del burro, mientras él va muy cómodo encima!".


Entonces, tomaron la decisión de subirla a ella al burro mientras padre e hijo tiraban de las riendas.

Al pasar por el tercer pueblo, la gente comentaba: "¡Pobre hombre! Después de trabajar todo el día, debe llevar a la mujer sobre el burro!¿Y el pobre hijo? ¡Qué le espera con esa madre!".

Se pusieron de acuerdo y decidieron subir al burro los tres para comenzar nuevamente su peregrinaje.

Al llegar al pueblo siguiente, escucharon que los pobladores decían:"¡Son unas bestias, más

domingo, 19 de octubre de 2014

Sequía en Condorumi

Cuento publicado en el Libro "El Sonido de las Caracolas"
Autor: Antonio  Goicochea
Imagen: EDUCARTE

Ya lo habían dicho los Ayachi, Condorumi tendría dos años de sequía; estas afirmaciones las hicieron luego de haber observado las estrellas, el sol, la luna, el rayo, las piedras, los ríos, los puquiales, las lagunas, tomando el pulso al futuro. Como siempre los pobladores, unos a favor y otros en contra de los pronósticos comentaban sus pareceres en los recodos de los caminos, en la plaza pecuaria, en cada reunión comunal.


Condorumi, era una ladera donde se habían ubicado las casas, y, unos cerros de bosquecillos seco-montanos, buenos para la cría de cabras. Los llanos en cambio servían para la cría de ovejas y vacas y para el cultivo de maíz asociado con frijol y otras menestras.

Con el paso de los días los pobladores de Condorumi se dieron cuenta que el puquio del que se abastecían de agua para el consumo humano ya traía menos agua y era necesario madrugar y hacer cola para recoger uno o dos baldes. La laguna que servía de abrevadero de los animales tenía menos agua que antes. El cielo ya no presentaba nubes y el sol calentaba más. Era un cielo azul turquí intenso, sin nubes. Los cultivos se secaban. Para satisfacer las necesidades de su querida profesora los niños tomaron la decisión de traer un capacho lleno de agua cada uno además del que traían para ellos.

La pequeña laguna se había tornado verde, sus aguas espesas hacían daño a los animales, tanto

martes, 14 de octubre de 2014

Admitir la miopía

Con afecto de Ruth Vásquez
Imágenes Educarte

Un anciano que tenia un grave problema de miopía se consideraba un experto en evaluación de arte.
Un día visitó un museo con algunos amigos. Se olvidó los lentes en su casa y no podía ver los cuadros con claridad, pero eso no lo detuvo de ventilar sus fuertes opiniones.

Tan pronto entraron a la galería, comenzó a criticar las diferentes pinturas.
Al detenerse ante lo que pensaba era un retrato de cuerpo entero, empezó a criticarlo.
Con aire de superioridad dijo:"El marco es completamente inadecuado para el cuadro. El hombre esta vestido en una forma muy ordinaria y andrajosa. En realidad, el artista cometió un error imperdonable al seleccionar un sujeto tan vulgar y sucio para su retrato.
Es una falta de respeto".
El anciano siguió su parloteo sin parar hasta que su esposa llego, se puso a su lado y al oído le dijo:

"Querido, -estas mirando un espejo!!!.


Moraleja: Nuestras propias faltas, las cuales tardamos en reconocer y admitir, parecen muy grandes cuando las vemos en los demás, debemos mirarnos en el espejo mas a menudo, observar bien para detectarlas, y tener el valor de corregirlas.

lunes, 13 de octubre de 2014

Los cipreses ornamentales, cuento por Antonio Goicochea

Cuento de Antonio Goicochea
Imagen: Educarte

Don Fredesvindo Chuquitanta, alcalde de Rumichaca, se quedó boquiabierta al ver por primera vez la plaza mayor de Wamanmarca.
-¡Cómo fuera así la placita de mi pueblo! -dijo.
-¡Los cipreses de aquí tienen forma de animalitos! 
¡Qué hermosos! Decía alelado. Llevaré la semilla y los plantaré en la placita de Rumichaca, será un parque tan hermoso como la plaza de Wamanmarca. 

El jardinero que tijeras en mano podaba las plantas, le dijo:
Señor, si está interesado yo le consigo plantitas en la cantidad que quiera. 
Esos cipreses, los que le haré comprar, forman llamas, vicuñas, ovejas, perritos o caballos. 
Depende de lo que usted quiera. 

Don Fredesvindo, que era de los alcaldes que disponen al toque, hizo cálculos, el parque tiene ocho triángulos, si en cada uno coloco tres plantas, necesito 24, por si algunas mueran, deben ser cincuenta, por sí alguna no pegue.
 -Necesito cincuenta. 

martes, 7 de octubre de 2014

El Eco

Con afecto de Ruth Vásquez
Imágenes Educarte

Jorge, que no sabía lo que era el eco, se divertía en la montaña montado sobre un palo de escoba y en gritar:
-¡Arre! ¡Arre!
Inmediatamente oyó las mismas palabras en el bosque cercano.
Creyendo que alguien se hubiera escondido, pregunto:

-¿Quien eres tu?
La voz misteriosa repitió inmediatamente:-
¿Quien eres tu?

Jorge, lleno de furor, grito entonces: -
 Tú eres un idiota.

En seguida la misteriosa voz repitió las mismas palabras.

Jorge montó en cólera y lanzo palabras cada vez mas injuriosas contra el desconocido que suponía escondido; pero el eco se las devolvía con la máxima fidelidad.


Jorge fue hacia donde creía le respondían, descubrir al insolente y vengarse de el, pero no encontró a nadie. Entonces marcho a su casa, y fue a consolarse con su mama a quien le comento lo sucedido.

“Hijo, te has engañado, pues lo que has oído ha sido el eco de tus mismas palabras” - le dijo la madre -.

“Si tu hubieras dicho en alta voz una palabra afectuosa, la voz de que hablas te hubiera respondido también en términos afectuosos.

”Lo mismo sucede en la vida y surgen dificultades para establecer una buena comunicación.

viernes, 3 de octubre de 2014

La moña, cuento de Antonio Goicochea

Autor Antonio Goicochea
Imagen: EDUCARTE  

– ¿A dónde vas, Lobita? –me dijo curioso el Meyengue.

– Voy a La Lucma, a don Jesusito, tengo que reclamar una moña para el toro que vestimos con mis hermanos. Meyengue, lleva estos dátiles pa’l Santiago, el Baquita y los patas de La Matanza. Mi papá está alegre y me ha comprado tanto que ya me harté.

A la sombra del amplio alar de su casa de campo, descansaba en una perezosa don Jesucito, artista plástico del pueblo, exalumno de Escuela de Artes de Lima. Las paredes exhibían hermosas litografías, aunque descoloradas por acción del sol y el tiempo. Sobre la mesa estaba la moña.

–Pasa, Antoñito, ahí tienes la moña, puedes llevarla, ya tu papá me ha pagado. Pero lávate las manos, quizá la vayas a ensuciar.

Mis manos mostraban residuos de las cajetas y dátiles que con dejadez y descuido había comido. Me lavé en un chorrito de agua del arroyo que pasaba al lado de la casa. Obsequiosa su esposa me alcanzó una toalla.

–Gracias, señora, gracias don Jesucito, dije.

Tomé la moña con cuidado. Era una mariposa plateada de raso de seda, tenía unos

martes, 30 de septiembre de 2014

El escondite perfecto

Con afecto de Ruth Vásquez
Imágenes Educarte

En el principio de los tiempos, se reunieron varios demonios para hacer una travesura.
Uno de ellos dijo: "Debemos quitarles algo a los humanos, pero?, que les quitamos?".

Después de mucho pensar uno dijo:"Ya se!, vamos a quitarles la felicidad, pero el problema va a ser donde esconderla para que no la puedan encontrar".

Propuso el primero: "Vamos a esconderla en la cima del monte mas alto del mundo", a lo que inmediatamente repuso otro: "no, recuerda que tienen fuerza, alguna vez alguien puede subir y encontrarla, y si la encuentra uno, ya todos sabrán donde esta".

Luego propuso otro: "Entonces vamos a esconderla en el fondo del mar", y otro contesto: "No, recuerda que tienen curiosidad, alguna vez alguien construirá algún aparato para poder bajar y entonces la encontrara".


Uno mas dijo: "Escondámosla en un planeta lejano a la Tierra".
Y le dijeron: "No, recuerda que tienen inteligencia, y un día alguien van a construir una nave en la que pueda viajar a otros planetas y la van a descubrir, y entonces todos tendrán felicidad".

El último de ellos había permanecido en silencio escuchando atentamente cada una de las propuestas de los demás. Analizo cada una de ellas y entonces dijo: "Creo saber donde ponerla para que realmente nunca la encuentren".

Todos voltearon asombrados y preguntaron al mismo tiempo:"¿Donde?". "La esconderemos dentro de ellos mismos, estarán tan ocupados buscándola fuera, que nunca la encontraran".


Todos estuvieron de acuerdo y desde entonces ha sido así: el hombre se pasa la vida buscando la felicidad sin saber que la trae consigo.

viernes, 26 de septiembre de 2014

Llegó la Banda, por Antonio Goicochea

Imagen: EDUCARTE
Es setiembre. El pueblo aguardó un año para volver a gozar de su fiesta patronal.

En el campo deportivo “San Pedro”, el “Once Amigos” de Zaragoza enfrenta al “Círculo Rojo” de la ciudad. A los alrededores, niños y adultos, hombres y mujeres, alientan a sus equipos. La barra de los zaragocinos se distingue por sus blancos sombreros de fiesta.

De pronto se escucha un cohete en El Pabellón.
– ¡La banda, la banda! –grita Santiago. En tropel, de todos los rincones del campo salen los niños y se dirigen por la Tacura al encuentro de “El Obrero”, el camión de don Vitalicio que este año se había devotado en transportar gratuitamente a los músicos.

–¡La banda, la banda!, ¡la banda, la banda! –gritan los niños y el barullo se hace general.
En la Curva de la Tacura se produce el encuentro.
Algarabía. Más cohetes de golpe confeccionados por el maestro Mayanga Gallo, pirotécnico contratado por los mayordomos para los fuegos artificiales de las noches de fiesta.

De encima de los costales y cajones de mercadería, descienden del camión, jóvenes y adultos, delgados

martes, 23 de septiembre de 2014

El alumno y el maestro

Con afecto de Ruth Vásquez
Imágenes Educarte

Un alumno quería aprender esoterismo de un gran maestro. 
Insistía mucho para que lo reciba en su clase a lo que el maestro se negaba una y otra vez

-Maestro es deber enseñar al que lo desea de corazón!
-No no lo haré, no insistas!

Un día, mientras el maestro caminaba a la orilla del río que tenia la ciudad, apareció el alumno, y le dijo:
-Creo que es el momento de que me enseñes Maestro...

-Ven. Acércate.
---Le dijo el maestro mientra el se aproximaba al agua del rio

--El maestro tomándolo de la cabeza lo sumergió en el agua un tiempo prudencial, cuando el alumno sentía que se ahogaba comenzó a rasguñar los brazos del maestro, y cuando este lo hubo sacado le preguntó,

¿que pensaste cuando te estabas ahogando?, acaso pensaste en tu familia? y el alumno después de haber tomado aliento respondió ¡NO!

¿En tus amigos?
-No-

¿Entonces que era lo que pensabas que necesitabas?
-Tenía hambre de Aire, Oxígeno.

Ah!.

Entonces cuando tengas esa misma hambre por aprender ese día te enseñare.

sábado, 20 de septiembre de 2014

AHORA, NO PODRÁ NEGAR QUE…por Antonio Goicochea

Cuento de Antonio Goicochea Cruzado
Imagen: EDUCARTE

Alguna vez Giordano le dijo, a Engracia, sus ardores y fervientes deseos de que Cupido flechara sus corazones y con vientos a favor fueran al tálamo, sin embargo, ella, desdeñosa, los rechazaba, no obstante sus labores profesionales los mantenía juntos. Esta vez luego de consumir un opíparo almuerzo que concluyeron  con unas copas de un Cabernet Savignon, tinto, de cosecha de diez años, fueron, como amantes del buen cine y críticos del mismo, del diario Veritas Veritatum, a la proyección de “Carne Trémula” de Almodóvar. 

Se apoltronaron en las butacas que la administración del establecimiento les tenía reservadas. A los treinta minutos se percataron que algunas parejas, salían en silencio, ocultando su bochorno, ya que solo los no iniciados en el sétimo arte lo hacían sin vergüenza ninguna. Giordano Malespina y Engracia de la Porta, no salieron, también por esas razones y más todavía porque tenían que cumplir con el encargo del diario para el que trabajaban y aunque se les cerraban los párpados, estoicamente, siguieron mirando la película. Pero llegó el momento en que los

martes, 16 de septiembre de 2014

El Albañil

Con afecto de Ruth Vásquez
Imágenes Educarte

Un hombre muy rico que un día llamo a su capataz y le dijo que el iba a salir en un largo viaje y que durante su ausencia quería que el le construyera una nueva casa. El hombre rico le pidió que le construyera una buena casa, que usara los mejores materiales y le dijo que el le pagaría por todos los gastos y la mano de obra a su regreso.

El capataz decidió que era absurdo trabajar tan duro, esforzarse tanto o emplear los mejores materiales cuando el dueño no estaba allí para supervisarlo.

Entonces comenzó a trabajar con menos precisión, a prestar menos atención a los detalles y comenzó a usar materiales de menor calidad, más baratos y a malgastar y derrochar vanamente el dinero que de esta manera ahorraba.

Cuando el dueño volvió de su viaje le pago por todos los recibos, por los materiales y por el tiempo trabajado.
Y luego le pregunto:
"ESTAS SATISFECHO CON LA CASA QUE ME HASCONSTRUIDO".


Cuando el capataz le respondió afirmativamente, el dueño le respondió
"Me alegro que asi sea porque la casa es tuya. Puedes vivir en ella por el resto de tu vida.

Conclusión: Tú estas construyendo tu vida desde que naciste. Tu vida es tu Casa. Estas viviendo en una Casa que es tu Vida

Cabe hacerte la pregunta....
¿Esta construyendo la clase de casa de la cuál puedes estar orgulloso de vivir por el resto de tu vida o estas usando materiales de baja calidad,

domingo, 14 de septiembre de 2014

Manuelito no quiere ir de paseo, de Antonio Goicochea

Cuento de Antonio Goicochea Cruzado
Imagen: Educarte
-¿Qué es lo que le pasa a Manuelito?- decía para sí la profesora Magna, al observar que ahora no se integraba al grupo que preparaba vituallas para el paseo a Rumichaca, no obstante que él era siempre el más colaborador de la clase.
-¿Manuelito, por qué no trabajas con el grupo?
-No voy a ir al paseo, mi buena señorita Magna.
-¿Pero por qué? ¿Podrías decirme tus razones?
-No deseo ir, señorita.
-¿Pero por qué?-, insistió la profesora.
-No quiero ir, señorita y punto.

Ante esa cortante respuesta, la profesora, permitió su actitud y le sugirió, como que era amante de la lectura, que se entretuviera en sus libros favoritos en la Biblioteca del Aula. Ya en la hora de recreo la profesora aprovechó para conversar con la directora. Le hizo conocer su extrañeza por la inusual conducta de Manuelito. Enterada la directora, ella, propuso ir a conversar con la mamá.

En las fichas de matrícula conocieron la dirección domiciliaria; y, decidieron que el

martes, 9 de septiembre de 2014

La sabiduría del águila

Con afecto de Ruth Vásquez
Imágenes Educarte

El águila es el ave con mayor longevidad de esas especies.
Llega a vivir 70 años, pero para llegar a esa edad, a los 40, debe tomar una seria y difícil decisión.

A los 40 años, sus uñas están apretadas y flexibles y no consigue tomara sus presas de las cuales se alimenta. Su pico largo y puntiagudo, se curva, apuntando contra el pecho.

Sus alas están envejecidas y pesadas y sus plumas gruesas. Volar se hace ya tan difícil!


Entonces, el águila tiene solamente dos alternativas: morir o enfrentar un dolorido proceso de renovación que durara 150 días. Ese proceso consiste en volar hacia lo alto de una montaña y quedarse ahí, en un nido cercano a un paredón, en donde no tenga la necesidad de volar.

Después de encontrar ese lugar, el águila comienza a golpear su pico en la pared hasta conseguir arrancarlo. Luego debe esperar el crecimiento de uno nuevo con el que desprenderá una a una sus uñas.

Cuando las nuevas uñas comienzan a nacer, comenzará a desplumar sus plumas viejas. Después de cinco meses, sale para su vuelo de renovación y a vivir 30 años más.

En nuestras vidas, muchas veces tenemos que resguardarnos por algún tiempo y comenzar un proceso de renovación para continuar un vuelo de victoria, debemos desprendernos de costumbres, tradiciones y recuerdos que nos causaron dolor.


Solamente libres del peso del pasado podremos aprovechar el resultado valioso que una renovación siempre trae.

domingo, 7 de septiembre de 2014

MAÑANA JUNTAREMOS MILLASHCUROS

Cuento de Antonio Goicochea Cruzado
Imagen EDUCARTE
            Cinco horas le consumieron el escabroso y largo camino. La señorita Gaby volvió a su escuelita rural después de una semana de justificada ausencia. Trajo a cuestas, sudorosa, además de sus semanales vituallas, un rollo de láminas.        
            Después de las rutinas de inicio semanal: formación, saludo a la bandera, himno nacional, oración matinal; desempolvó una lámina vieja del anaquel de la dirección, abandonada hacía varias décadas, donde se veía a un tren junto a un letrero de cuatro círculos que decía: ojo, pare, cruce, tren, e inicia la clase LAS REGLAS DE TRÁNSITO, ayudándose, además, del rotafolio traído.
            -Mañana comeremos papa, quesillo, huacatay y rocoto. Decía para sus adentros Manuel.
            Muy locuaz la señorita explicó las reglas. El rotafolio se iniciaba con la lámina de un policía con guantes, correa y caso blancos, la segunda lámina presentaba un cruce de calles de una gran ciudad, la tercera un semáforo solo. La lámina del tren la colgó en un clavito que había en una pared lateral del aula.
            A reojo los alumnos miraban la lámina del tren. No conocían ni barcos, ni trenes. Solo conocían camiones que veían en la lejana carretera, al frente, en el otro cerro; y, a los aviones que veían chiquitos por los aires. De pronto un alumno

martes, 2 de septiembre de 2014

Aférrate a lo que realmente importa en la vida

Con afecto de Ruth Vásquez
Imágenes Educarte

  • Aférrate a la fe porque es la fuente de la creencia de que todo es posible.  Es la fibra y la fortaleza de un alma confiada.
  • Aférrate a la esperanza porque destierra la duda y da lugar a actitudes positivas y alegres.
  • Aférrate a la confianza porque se encuentra en el corazón de las relaciones fructíferas que son seguras y satisfechas.
  • Aférrate al amor porque es el don mas preciado de la vida, porque es generoso, se preocupa y da significado a la vida.
  • Aférrate a la familia y a los amigos porque son las personas más importantes en tu vida y porque hacen del mundo un lugar mejor. Ellos son tus raíces y la semilla de la cual creciste, son la vida que ha crecido con el tiempo para alimentarte, ayudarte a seguir tu camino y permanecer siempre cerca de ti.
  • Aférrate a todo lo que eres y a todo lo que has aprendido, porque esto es lo que te convierte en un ser singular. No menosprecies lo que sientes y lo que crees que es bueno e importante, tu corazón te habla con más fuerza que tu mente.
  • Aférrate a tus sueños, alcánzalos de manera diligente y honrada. No temas nunca al camino más fácil ni te rindas ante el engaño.
Recuerda a otros en tu camino y dedica tiempo para atender sus necesidades.


viernes, 29 de agosto de 2014

EL LANDARUTO, por Antonio Goicochea

Tradición sanmiguelina
Escribe: Antonio Goicochea Cruzado
Imagen: EDUCARTE
El landaruto, es la fiesta familiar que se hace en el primer corte de cabello de un niño, preferentemente en el área rural. Suele realizarse en el cumpleaños, entre el segundo y el quinto. Para ello se escogen los padrinos entre las amistades o familiares con mayor posibilidad de hacer buenos regalos. En algunos casos puede ser que el familiar o amigo pida ser el padrino de corte de pelo.
La víspera de la ceremonia, la mamá ha mingado a las vecinas o amistades de mayor confianza para hacer los preparos para la comilona. El papá se ha encargado de contratar a la banda típica de músicos o al mejor equipo de sonido del lugar. Los cuyes cuelgan de poste a poste, las gallinas rebosan las lipas.
Llegado el día, por la mañana, las mingas llenan  las pailas de papas peladas, hacen sonar los batanes en la molienda de condimentos y rocoto y barren la casa.

Antes que el sol se oculte, el papá, estrenando sombrero de palma y poncho merino, botella en mano recibe a los invitados. Ya se dejan escuchar los acordes musicales, que van poniendo el ánimo en punto.
Por la noche, la madre, ataviada con el mejor traje y con sombrero nuevo de palma, es ubicada en una silla en el lugar más destacado de la sala, que puede ser también al centro, carga en faldas al niño, al cual se le han amarrado mechoncitos de pelo (shimbas), los más que se han podido para dar oportunidad de más cortes.
Los padrinos, marido y esposa, con tijeras en mano, cortan sendos mechoncitos

martes, 26 de agosto de 2014

Henry Ford y su Motor V-8

Con afecto de Ruth Vásquez
Imágenes Educarte

Hace años, Henry Ford decidió desarrollar el ahora célebre motor conocido como V-8. Quería construir un motor con los ocho cilindros fundidos en un solo bloque.
Dio instrucciones a los ingenieros en el sentido de que proyectaran semejante motor. Los ingenieros afirmaron como un solo hombre que era de todo punto IMPOSIBLE fundir un bloque de motor de ocho cilindros en una sola pieza.

"Háganlo de todos modos", les dijo Ford.
"Pero es que no es posible", replicaron ellos.

"Pongan manos a la obra
-les ordenó Ford- y sigan esforzándose hasta que lo consigan, no importa el tiempo que haga falta".
 
Los ingenieros pusieron manos a la obra. No tenían más remedio que hacerlo, si querían seguir perteneciendo al equipo de la Ford.
Transcurrieron seis meses sin que lo lograran.
Transcurrieron otros seis meses y tampoco lo consiguieron.
Cuanto más lo intentaban, tanto más"imposible" parecía.
"A finales de año, Ford se puso en contacto con sus ingenieros.
Una vez más, éstos le informaron de que no habían sido capaces de cumplir sus órdenes.

"Sigan trabajando -les dijo Ford-.
Lo quiero y lo tendré".
¿Y qué ocurrió?

viernes, 22 de agosto de 2014

Adonde fueres, haz lo que vieres, cuento por Antonio Goicochea

Cuento de Antonio Goicochea Cruzado
Imagen: Educarte
Ahora, que conocería Rioja, tierra de los ancestros de su adorada Vidalina, se conduciría de la mejor manera, seguiría la conseja: “Adonde fueres, haz lo que vieres”, que siempre lo escuchó de sus mentores; y, teniendo como guía esta sentencia popular para su actuar en mundos desconocidos, se planteó Macedonio, participar en todas las actividades de su nueva familia, como un miembro más, para que no fuera visto como un “adecentado” o como un estorbo.

Macedonio Quiroz y su idolatrada Vidalina Iberico, venían desde Cajamarca, sorteando peripecias angustiantes en el camino, a lomo de mulas y con un arriero como guía, pasando por Celendín y Chachapoyas, llegaron a Rioja, él a conocer los ancestros de la consorte y ambos a celebrar un año de feliz matrimonio.

Pasada la efusión de la bienvenida, doña Filiberta, mamá de Vidalina, hacía los preparativos para hacer el típico plato poroto

martes, 19 de agosto de 2014

El acróbata y la joven

Con afecto de Ruth Vásquez
Imágenes Educarte

Un hombre y una joven huérfana se habían especializado en un número circense que consistía en que la niña trepaba por un lago palo que el hombre sostenía sobre sus hombros. La prueba no estaba exenta de riesgos y por eso el hombre le indico ala joven:

-Mira, para evitar que pueda ocurrirnos un accidente, lo mejor será que, mientras hacemos nuestro número, yo me ocupe de lo que tu estas haciendo y tu de lo que hago yo.
De ese modo no correremos peligro.

Pero la joven, mirando fijamente al hombre, replico:
-No, eso no es acertado. Yo me ocupare de mí y tú te ocuparas de ti, y así, estando cada uno muy pendiente de lo que uno mismo hace, evitaremos cualquier accidente.

Permanezca atento  y vigilante de usted y libre sus propias batallas en lugar de intervenir en la de otros.
Atento de usted mismo, avanzara seguro


viernes, 15 de agosto de 2014

La cartita esperada, cuento por Antonio Goicochea

Cuento de Antonio Goicochea Cruzado
Imagen: EDUCARTE

Ninguno, como yo, estaba más ansioso, de que abrieran el paquete que llegó a la Dirección de mi escuela “José Antonio Encinas” con la respuesta a nuestras cartitas que les escribimos a nuestros amigos asháninkas, a los que hacía un mes y medio los habíamos visitado.

En mi cartita le decía a Juaneco Shirorinki mis impresiones de la semana que pasamos en su comunidad, -
“cuando en un mortero de piedra, sacamos “del sacha inchi su aceite”, y que me dijiste que era buenenque para quitar “de la sangre sus grasas malas”, cuando  “recogimos parel majaz y parel ronsoco su yerbita”, y cuando me pinché el dedo al colocar la carnaza en el anzuelo y me envolviste mi dedo con una hojita y lo amarraste con la corteza de una liana y al día siguiente, no tenía ningún daño”. Y, le decía que  nuestros talegos de dormir, solo sirvieron de colchón en las tarimas de caña, por el calor, en cambio si nos sirvieron los mosquiteros. Que la yuca, el plátano, los peces del río y los animales del monte hacen de su comida una exquisitez. Le decía, también, que aquí en Lima preparé patarashca con cachemita y hoja de plátano, no como allá con gamitana y bijau. Que me gozo de haber hecho un amigo, un confidente que me enseñó cómo respetar la naturaleza, respetar y querer a las áreas protegidas y que le seguiré contando de mi escuela y de mi vida, al igual que espero que él me cuente las suyas.

La profesora Érika abrió el paquete, puso, en la mesa central de conferencias, las cartas para que cada uno cogiera la suya. Todas traían el mismo sobre, los abrimos. Las cartitas venían en un en un hermoso papel de color verde, como la naturaleza selvática,

Y todos, sorprendidos, después de leer las primeras líneas, husmeamos en la carta del vecino y así la de los otros y como impulsados por un resorte al unísono leímos: Río Negro, Satipo, Junín, 25 de julio del año del 2005.